- STEM es una sigla en inglés que se refiere a ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, áreas del conocimiento que históricamente han estado dominadas por el hombre; una realidad que hoy mujeres y niñas intentan revertir en Chile.
De acuerdo a un estudio de ONU Mujeres de 2020, Chile es el país con el menor porcentaje de mujeres graduadas en el área de la tecnología, el tercero con menor índice en ingeniería y el cuarto en el área de ciencias, indicadores que evidencian una deuda que implica pérdida de talento valioso y un llamado para desarraigar sesgos de género en estas áreas.
El 11 de febrero se conmemora el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una invitación para reflexionar y movilizarnos para incentivar más vocaciones científicas y este es precisamente el llamado que realiza «PROVOCA» hace ya 5 años. PROVOCA es una iniciativa de Associated Universities, Inc. y el Observatorio Radioastronómico Nacional de Estados Unidos (NRAO) -socios norteamericanos del observatorio ALMA-,cuyo nombre es un juego de palabras que alude a «promover vocaciones científicas» y que busca impulsar una mayor participación y retención de grupos tradicionalmente subrepresentados en carreras u oficios STEM, donde sin duda las mujeres siguen siendo minoría.
Andrea Moyano es egresada de licenciatura en física con mención en astronomía, de la Universidad de Valparaíso, y cuenta que -según recuerda- de 25 alumnos al ingreso de la carrera, finalmente se graduaron 3 y ella fue la única mujer. Señala que experimentó mucha competencia y no de la «sana», pero conforme pasaron los años, fue conociendo grandes compañeras, compañeros y profesoras que le ayudaron a perseverar y confiar en sus capacidades. Precisamente esa experiencia la motivó a postular al programa gratuito de mentoría PROVOCA en 2022 y así sumarse a una red de estudiantes de enseñanza media, educación superior y profesionales en STEM, contribuyendo con su testimonio y aprendizajes a las nuevas generaciones de científicas. «Ha sido muy enriquecedor aprender de mujeres tan potentes en diversas áreas de las STEM y en un clima de colaboración y sororidad en que solo nos ayudamos unas a otras, y podemos vernos reflejadas en sus experiencias, lo que permite que no se sigan cometiendo los mismos errores y que se vayan derribando mitos tan instalados en las disciplinas duras. Conocer a al menos una mujer que ya haya vivido una experiencia similar, es un regalo de oportunidades para una niña o una joven que lidia con sus temores en algún rincón del país», asegura Andrea.
Este fue el caso de Grace Fox (hoy en tercero medio), estudiante del Colegio Municipal Las Condes, quien se animó a postular al programa gracias a la invitación de su profesor de física y se sumó al grupo de 47 estudiantes de 10 regiones de Chile. «Pese a que aún no tengo claro cuál carrera voy a elegir en unos años, al principio pensaba que la ciencias eran solo para mujeres «secas» y que yo estaba lejos de serlo. El año pasado aprendí que esa sensación se llama síndrome del impostor, una realidad que afecta principalmente a mujeres y que nos hace sentir que nuestros logros no los alcanzamos por mérito propio, talento o capacidades, sino más bien por suerte e incluso un error de entorno, y que más temprano que tarde seremos descubiertas y perderemos esta oportunidad de éxito». Hasta antes de ser parte de este programa, Grace no consideraba la ciencia como una opción de estudios superiores. Hoy siente que la matemática y la física posiblemente la llevarán por el camino de las ingenierías, aunque ya perdió el temor a ampliar sus opciones. Aún le restan un par de años para tomar esa decisión y su familia la apoya incondicionalmente.
La mentoría es un modelo de trabajo colaborativo en que tanto la mentora como en este caso la estudiante dan y a la vez reciben de manera constante, evidenciando que nunca se deja de aprender y crecer, tanto en lo humano como en lo profesional. Eliminar sesgos de género y estereotipos culturalmente arraigados en nuestra sociedad sobre las profesiones y oficios «apropiados» o no para las mujeres, exige la tarea de visibilizar y acercar a las estudiantes a referentes femeninos que ejercen trabajos largamente dominados por los hombres. En este contexto, la familia, los educadores y las mismas mujeres en STEM, tienen la tarea de mostrar tanto sus capacidades como la compatibilidad de ciertas áreas de la ciencia con distintos proyectos de vida para las chilenas.
Catalina Arcos trabaja desde 2018 como astrofísica en el Instituto de Física y Astronomía de la Universidad de Valparaíso. Aún cuando llegó a este puesto invitada por la misma casa de estudios al terminar su doctorado, durante el proceso de decidir si tomarlo o no, batalló con sus fantasmas, pese a que contaba con colegas que confiaban plenamente en sus capacidades. Hace un año se formó como mentora de PROVOCA gracias a una invitación de otra profesora universitaria. «Recuerdo que no me sentía apta para inspirar a nadie, ya que yo luchaba con mis propias inseguridades. Durante el programa aprendí a escuchar y saber cuándo y cómo ayudar con un comentario o un consejo. Recuerdo también que en un ejercicio con mi coach, durante el proceso de formación, me di cuenta que me juzgaba con mayor severidad que mi entorno social y que eso no hacía más que sepultarme. Es muy provechoso identificar nuestras propias metas y las dificultades que nos impiden alcanzarlas, saber administrar el tiempo y procurar una buena calidad de vida». Hoy Catalina es parte de un par de proyectos de investigación Fondecyt para estudiar estrellas masivas en los siguientes 3 a 4 años, además de dictar talleres de física y astronomía para niños del programa Mejor Niñez, ex Sename, de 4 residencias de la Región de Valparaíso. «Quiero sembrar la semilla del amor por la ciencia en las nuevas generaciones y darle la posibilidad de mirar las estrellas por un telescopio a niños y niñas que nunca tuvieron esa oportunidad. Siempre es posible compartir desde la ciencia y aquí el género no marca ninguna diferencia».
En abril se anunciará una nueva convocatoria para participar como mentora o estudiante del programa gratuito PROVOCA de AUI/NRAO Chile. Más información en www.provoca.org.